jueves, 8 de enero de 2009

VICTIMAS Y VICTIMARIAS

Las mujeres en el ejército de los Estados Unidos

VICTIMAS (primera de dos partes)
Por Rocío Duque

El cuerpo de La Venna Johnson*, (en la foto a la izquierda) soldada de infantería de primera clase , presentaba golpes, abrasiones, un ojo morado, la nariz rota, sus manos y sus genitales habían sido quemados, le faltaban varios dientes y el hoyo dejado por una bala se apreciaba en su cabeza. Iba a cumplir 20 años cuando su cuerpo fue encontrado en una barraca de la firma contratista Kellog , Brown & Root (KBR) en Balad, Irak, hace tres años.

La autoridad militar estadounidense dictaminó suicidio.

La familia, en absoluto estupor, luchó durante todo este tiempo para obtener los archivos forenses y llevar a cabo su propia investigación. El padre de La Veena, él mismo un veterano y un médico, encontró aun más incontrovertible evidencia cuando finalmente éstos fueron entregados a la familia. Las fotocopias del area genital de su hija habían sido alteradas, pero una vez restauradas, demostraban violación. Más aún, el orificio en la cabeza de LaVeena estaba en el lado izquierdo, cuando ella no era zurda. Las autoridades militares aseguraban que el arma usada había sido un poderosos M-16, lo cual no concuerda con la herida, ni en proporción ni en ángulo de tiro. De acuerdo a la estatura de La Veena , el ángulo de disparo y el poder del proyectil, un M-16 simplemente hubiera volado totalmente su cabeza, ;o que no sucedió.

Pero la familia Johnson no está sola en su desgracia, en dos sentido.

Por un lado, docenas de familias ya se organizan para averiguar la verdad sobre muertes sospechosas y casos de violación y abuso sexual a sus hijas en la milicia.

Por otro, cuentan con el apoyo de la coronela Ann Wright , una veterana opositora a la guerra en Irak y que ha seguido incansablemente los casos de muchas mujeres muertas en controversiales circunstancias mientas servían en las fuerzas armadas.

Wright, quien recibió una medalla al heroísmo por su papel en la evacuación de 2500 civiles durante la guerra civil en Sierra Leona, renunció al ejército el día anterior al inicio de la invasión. En su carta de renuncia ella mencionó no sólo su desacuerdo con ésa sino también con la política estadounidense en Palestina y las restricciones de las libertades individuales en Estados Unidos y se ha convertido en una figura central en el movimiento pacifista. Es también autora de muchos artículos sobre el tema y co -autora de Dissent, Voices of Conscience.Government. Insiders Speak Out Against the War in Iraq.

Sobre los casos de La Veena y otros, ella dice: “ Hemos encontrado a través de las investigaciones de otras muertes – tú sabes, hay 98 mujeres militares muertas en Irak, Kuwait y Bahrain. 40 de ellas han muerto en incidentes fuera de combate...19 de esas 40 , bajo sospechosas circunstancias. 13 de éstan han sido declaradas suicidios por los militares.”

Por su parte William Cole (As Army marks 30 years of female troops, many roles still denied to them) señala que en total unas 100 mujeres en la milicia han muerto en las guerras de Afganistán e Irak.

Wright menciona otro caso similar; Kamisha Block quien fue asesinada de 5 tiros en una barraca por un compañero de armas. A la familia se le dijo que ella había muerto por heridas en combate.

En otros casos no es asesinato sino violación: El pasado diciembre , una empleada de Halliburton/KBR , Jamie Leigh Jones, denunció que en 2005 fue violada tumultariamente por sus propias compañeros de trabajo, cuando estaba trabajando en Bagdag. Desde entonces , 38 mujeres se han comunicado con Jones para decirle que ellas también fueron víctimas de violación por compañeros de trabajo de Halliburton/KBR. Leigh dio a conocer esto a un comité del Congreso, y durante su comparecencia les dijo que muchas mujeres no pueden hablar sobre esto debido a los acuerdos y contratos que ellas firmaron con su empleador!
Algo todavía más espeluznante en la odisea de Jones: “De acuerdo a un exámen por doctores del ejército se mostró que ella había sido violada vaginal y analmente, pero de alguna manera el kit con los resultados desapareció después de haber sido entregado... a oficiales de seguridad de KBR! Después de haber reportado su violación a KBR, Jones dice que ' la compañía la puso bajo guardia en un contenedor con una cama y le advirtió que si salía de Irak para tratamiento médico ella perdería el trabajo" Después de por lo menos 24 horas en el contenedor sin agua y comida un guardia compasivo le permitió comunicarse con su familia en Texas"
( Más allá del bien y del mal por Rocío Duque)

Finalmente, en agosto, tras meses de lucha contra la poderosa burocracia militar y contratista, el caso de Jones fue aceptado por la corte y el juicio empazará pronto. Otras 12 empleadas de KBR han denunciado hasta ahora asaltos similares.

A su vez, Martha Mendoza de la Associated Press National escribió:
"
Más de 100 jóvenes mujeres que expresaron interés en unirse al ejército en el pasado año fueron abusadas sexualmente por sus reclutadores. Las mujeres fueron violadas en los sofás de de las oficinas de reclutamiento, asaltadas en carros gubernamentales y manoseadas en ruta a los exámenes de admisión. Una investigación de seis meses de Associated Press encontró que más de 80 militares reclutadores fueron disciplinados el año pasado por mala conducta sexual con potenciales reclutas. Los casos ocurrieron en todas las ramas militares y en todas la regiones del país.”

Por supuesto, no existe un record exacto de las mujeres atacadas sexualmente en las fuerzas armadas, de la misma forma que no lo existe de las mujeres atacadas en la vida civil. Sin embargo algunas cifras pueden ayudar a apreciar la dimensión del problema.

  • Las mujeres representan el 7.1 % de veteranos de guerra (1.7 millones)

  • Ellas son el 15% del personal de servicio en las fuerzas activas.

  • Son mujeres el 11% de los soladados en Irak y Afganistán

  • Màs de 191, 500 mujeres han servido en el Medio Oriente desde 2001.

  • Cerca de un tercio de las veteranas dicen haber sido asaltadas sexualmente o violadas durante su servicio en la milicia.

  • De ellas, entre un 71 % y un 90% aseguran que fueron atacadas por un superior.

  • El Pentágono reconoce que el 80% de las violaciones en la milicia nunca han sido reportadas.

A pesar de ser uno de los grupos de más rápido crecimiento en la milicia, las mujeres son aun un grupo minoritario.

Algunas de las entrevistadas por Helen Benedict ( The private war of women soldiers) relatan sus experiencia como unas de las 19 mujeres reclutas en una unidad de 160 soldados en Irak.

Mickaela Montoya, de la Guardia Nacional, dice que allá llevaba consigo siempre un cuchillo : “...el cuchillo no era para los iraquíes, sino para los tipos que estaban 'de mi lado”.

Casos de violación de afganos o iraquíes contra mujeres militares de las fuerzas de ocupación? Cero. Y ciertamente esto no se debe a que sean unos caballeros sino a que las mujeres, como parte de las fuerzas invasoras, están protegidas de los de “afuera”, pero no de los de “adentro”. Aún más, los papeles de dominio y sumisión en ese caso han sido alterados por la invasión, como veremos más adelante.

Ciertamente en el imaginario colectivo de un pueblo, la violación de “sus” mujeres aparece como la ultima humillación , una herramienta de la guerra total , una estrategia militar dirigida a quebrar al enemigo no sólo militar y fisícamente sino también emocional y psicológicamente.

La violación ha llegado a ser el rasgo definitorio de la guerra total en estos primeros años del siglo XXI”, señala David Rosen en su magnífico estudio La violación como un instrumento de guerra total en el siglo XXI” (versiones en español en : www.sinpermiso.info e inglés en: http://www.counterpunch.org, sin duda, una lectura obligatoria.).

Paradojicamente, las mujeres violadas por el “enemigo” son frecuentemente repudiadas por su propio pueblo.

Por otro lado, la imágen de la “dama en apuros” (la princesa secuestrada ), amenazada y abusada por “el otro” también tiene un poderoso atractivo “galante” que es explotado como parte de una propaganda que pinta al enemigo como un depredador sexual insaciable y lo identifica más con los animales que con los humanos (una razón más para no tener piedad!) .

Así, la administración Bush buscó su propia épica galante con la ficticia historia de Jessica Lynch, quien supuestamente había sido capturada por los iraquíes durante una emboscada y sometida a tortura y probablemnte a violación y eventualmente rescatada por los caballeros de la coalición en brillantes armaduras y montando caballos blancos . Jessica (atractiva, joven, rubia y de ojos azules) fue recibida como víctima y heroína de regreso a los Estados Unidos, con desfiles y toda la cosa

Pero la historia resultó un fiasco, tan falso como las armas de destrucción masiva. Ella tuvo sus 15 minutos de gloria y el periodista Rick Bragg , el premio Pulitzar por la biografía autorizada de Jessica ( I Am A Soldier Too: The Jessica Lynch Story) .

Y como para no volver a confiar nunca más en premios como el Pulitzer o el Nobel:

La biografía autrorizada, I Am A Soldier Too: The Jessica Lynch Story, por el ganador del premio Pulitzer, el periodista Rick Bragg asegura que Lynch había sido violada durante su cautiverio, basado en reportes médicos y su patrón de heridas. Sin embargo , Lynch, desde entonces ha declarado no recordar ningun asalto sexual y se ha opuesto reiteradamente a incluir cualquiera declaración de violación en el libro, pero Bragg no le hizo caso y le dijo que 'la gente necesita saber que esto le puede pasar a una mujer soldado'. Los doctores estadounidenses que la examinaron despues del rescate reportaron que ella había sido 'brutalmente violada y sodomizada por iraquíes durante las 3 o 4 horas después de la emboscada , cuando ella estaba inconciente”

Para crédito de Lynch, hay que decir que ella no sólo ha negado la historia de la violación sino que también se opuso a la instrumentalización de su imágen:

Sobre el uso de ella por el Pentágono dijo en entrevista con Diane Swayer que:

...ellos [los militares del Pentágono] me usaron para simbolizar toda esta cosa. Es incorrecto, Yo no sé por qué ellos filmaron mi rescate o por qué ellos dicen estas cosas” Tambié reportó haber sido tratada bien por sus captores .

Por cierto, en la emboscada en la que Lynch fue capturada también lo fue la afroamericana Shoshana Johnson, quien también rescatada, pero al parecer una negra supuestamente violada por el enemigo no es una imágen ni conmovedora ni nueva para el publico estadounidense, asi que sobre ella no hay mayor épica ni propaganda.,,ni biografía, ni Pulitzers...

Por supuesto, todo mundo en los Estados Unidos recuerda el ficticio martirologio de Jessica Lynch pero pocos, muy pocos el muy real de La Venna Johnson.

Por otra parte, la realidad brutal de la guerra y la percepción de que el “enemigo” no sólo està allà afuera , acechando en la obscuridad, sino en tu propia barraca ha tenido un efecto devastador en la salud mental de las reclutas. De regreso a casa, ellas deben recurrir a un sobre saturado sistema de salud ineficaz y diseñado para las necesidades masculinas. Al grado que las mujeres que son víctimas de violación en el ejército deben pagar por sus propias pruebas médicas de violación, ya que estas no son cubiertas por el seguro médico del ejército! (Raped in the Military? You May Have to Pay for Your Own Forensic Exam Kit por Penny Coleman ) .
Y, por cierto, por qué en primer lugar , las mujeres se enrolan en una institución en las que estas cosas pasan? La respuesta es ciertamente compleja y probablemente es similar a la de por qué las mujeres entraron en la fuerza de trabajo de las fábricas de explotación de los talleres de costura de finales del siglo XIX, donde también eran acosadas. Y abusadas .

Las respuestas van desde razones económicas hasta la de un patriotismo, difícil de entender quizás para nosotras pero perfectamente lógico desde otro punto de vista.

Pero hay más: el ejército estadounidense con sus rígidas estructuras organizativas y su prestigio de poder (estamos hablando de la máquina militar más poderosa del mundo) tiene un encanto difícil de resistir para jóvenes en busca de identidad, pertenencia y..claro... poder . No es extraño, pues, que los sectores de mayor crecimiento entre los reclutas sean mujeres y minorías étnicas.

Una historia más antes de terminar:

En el 2006, la coronela Janis Karpinski reportó que en el 2003 tres mujeres soldadas que servían en Irak murieron de deshidratación por haberse rehusado a beber líquidos durante la tarde, en días en que la temperatura podía subir hasta más de 40 grados. La razón de esto era que ellas temían tener que ir a las letrinas durante la noche, donde frecuente e impunemente, las mujeres eran acechadas y violadas por soladados hombres de sus propios batallones.

Paradojicamente Karpinski es una figura controversial en la milicia, no por su denuncia sobre la situación de las mujeres en el ejército, sino por haber sido la primera al mando en ese lugar del horror llamado Abu Ghraib. Y ciertamente no fue la única mujer en permitir y ejecutar la tortura, el asesinato y, sí, la humillación sexual de prisioneros varones...pero esa es otra historia para nuestra próxima entrega y de cómo las víctimas devinieron en victimarias...

* Hay una gran cantidad de artículos en Internet sobre el caso de La Vena Johnson así como sitios dedicados a exigir justicia para ella, entre ellos:

Pfc. LaVena Johnson (sitio oficial)

Justice for LaVena Johnson - The Petition Site

YouTube - rape in the u.s. military - it's a man's world

Democratic Underground - La Vena Johnson, Private First Class US ...



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